Hoy voy a sincerarme con vosotros y le dedico este articulo a niños que estáis pasando por esto o hayáis sufrido este estado tan duro como es la depresión.
Yo no he sido siempre la persona tan amarga, rebelde y negativa que soy ahora. Hace unos años considero realmente haber tocado fondo. Las personas tristes son las que están pasando por una depresión. Unos lleváis muy poco tiempo en ese estado depresivo y otros lleváis mucho y ya seréis unos expertos en estar tristes. Si, suena negativo, muy negativo y seguro que a vosotros también pero llevéis el tiempo que llevéis, eso quiere decir que a lo mejor no sabéis como solucionarlo.
No os digo que este articulo os vaya a solucionar la vida y ni por asomo este blog os va a quitar la depresión como por arte de magia y ya no volváis a estar tristes nunca mas porque simplemente yo no tengo esa capacidad. La buena noticia es que a pesar de que nadie pueda "curarte" de un estado así es que tu si que puedes tener esa capacidad. La depresión es una cárcel en la que tu mismo eres el prisionero y el carcelero, la cerradura y la llave al mismo tiempo.
Sé que muchas personas piensan que los problemas no hay que evadirlos sino enfrentarlos y mucha gente os habrá dicho esto a lo largo de vuestra vida pero hay una gran diferencia entre un problema que es solucionable y un problema que está totalmente fuera de nuestro alcance y que no hay forma alguna de arreglarlo.
Lo cierto es que los problemas que nos llevan a la depresión son problemas que realmente no tienen solución alguna o por lo menos que están fuera de nuestro alcance, entonces ponerte a confrontar algo que no puedes solucionar es ridículo, es perder el tiempo, es dedicar tu vida a algo que no puedes arreglar, es pensar demasiado y dedicar tu tiempo vital a amargarte y por eso odio ese consejo si es que se le puede considerar un consejo.
No hay que evadir los problemas porque evadir significa que le tienes miedo, evadir los problemas significa que no quieres ni mirarlos porque solo de verlos te puedes echar a llorar pero el buen camino es que simplemente los problemas no te importen y esa es la base de todo, cuando te den absolutamente igual todo lo que ocurra a tu alrededor, en ese momento los problemas no se desvanecerán, nunca se desvanecerán jamas pero dejaran de tener importancia. Lo cierto es que los problemas nunca desaparecen, no importa lo que ocurra ni donde estés, no van a desaparecer nunca.
La gente tiende a pensar cosas como "cuando tenga mas dinero no tendré mas problemas" o "cuando termine mis estudios se acabará esto" o " cuando me mude esto ya no será así" pero incluso hasta la gente más rica, mas poderosa y con mas éxito del mundo y que este genial de salud, incluso esa persona tiene problemas, todos tienen problemas.
Lo cierto es que no existe la vida sin cosas que nos amarguen y que nos causen dolor, eso quitátelo de la cabeza desde ya porque la vida es una sala de torturas de la cual solo podemos salir muertos.
Pero claro, también estoy seguro de que pensarás que eso es muy fácil decirlo ¿verdad? pero muy difícil hacerlo ¿lo es?¿ quien decide exactamente la importancia de tus problemas?¿ lo deciden tus profesores?¿tus padres?¿el presidente del gobierno?. El único que decide la importancia que le das a los problemas, eres tu mismo, eso lo determinas tu y solo tu.
La próxima vez que vayas a pensar en tus problemas, en lo amargado que estas porque te duele algo o porque no te hace caso las personas que quieres o estés pasando por una mala situación familiar, pregúntate esto, si tus problemas realmente no tienen solución, ¿para qué preocuparse? y si tus problemas tienen solución ¿para qué preocuparse?. Molestate un rato en analizar esta frase y repite varias veces y compréndela bien hasta grabarla a fuego en tu cabeza.
Si tan fácil es tomar una decisión, que lo es porque es fácil decidir lo que quieres y lo que no quieres, entonces ¿por qué te cuesta tantísimo decidir algo que es bueno para ti, que necesitas con urgencia?¿por qué te cuesta tanto decidir que no quieres seguir en tu depresión?. Es tan sencillo que tu primera decisión no debe empezar por ahí, intentar superar una depresión diciendo quiero ser feliz es como hacer un dibujo deseando terminar sin saber que vas a dibujar al final.
Por eso sé fuerte para enfrentar a todos los que causan tu depresión y dile a tus problemas que ya no te importan y verás como dejaran de dolerte.