El pasado sábado 19 de Mayo, llegó el gran día en el que el indomable príncipe Enrique de Inglaterra se casó con la actriz canadiense y plebeya divorciada Meghan Markle.
La Familia Real de Inglaterra no está muy satisfecha de la mujer que Enrique ha elegido como su actual esposa.
Meghan ha tenido que enfrentarse a sus hermanos y en especial a su padre Thomas Markle,que estaba convaleciente tras una operación del corazón.
La interprete Americana del drama "Suits" se ha transformado en una princesa Británica y ya el pueblo Londinense la adora.
La gran boda tuvo lugar en el castillo de Windsor y ningún londinense quiso perderse el enlace por lo que causaron un problema de espaco en los vagones del tren, que salió a las 4:40 a.m desde Waterloo con destino a Windsor.
Enormes filas de gente salieron del tren que paró en windsor. En las puertas del castillo había canadienses que habían acampado dos días antes. Hasta el mismísimo señor alcalde de Windsor John Lenton y su esposa Margaret, intentaron pasar entre la multitud para llegar al castillo, pero no lo logró debido a que la multitud no le reconoció y no permitió su paso.
Así de bonita luce la capilla de San Jorge, donde tendrá lugar la ceremonia, salpicada de rosas blancas. En este lugar ya habido otras bodas célebres antes: Eduardo VII con Alejandra de Dinamarca en 1863; los condes de Wessex, Eduardo y Sophie Rhys-Jones en 1999, y el príncipe Carlos y Camila, en 2005.
Al enlace acudieron famosos como Ophra Winfrey y el actor Idris Elba, junto a su novia, Sabrina Dhower, James Blunt con su mujer, Sofia Wellesley, hija del duque de Wellington, George Clooney y David Beckham junto a Victoria
En resumen, la feliz pareja fue acompañada en su día especial por toda Inglaterra y como no podía faltar, incluso la familia de Diana de Gales les dio la bendición en nombre de la madre del novio y esperemos que allá donde esté, se sienta orgullosa de su hijo menor,
Henry de Gales.
